Os traemos la crónica de Nápoles, más tarde de lo esperado pero entre unas cosas y otras había dejado apartado este post.
Esta vez el viaje fue por motivos de trabajo, pero aún así tuve un hueco para disfrutar de nuevo de la ciudad ya que hacía años desde la última vez que estuve en Nápoles.
Me desplacé en coche desde Bari con otras compañeras del trabajo, Nápoles se encuentra a 2 horas y media de Bari. Para aquellos que tengáis pensado visitar Nápoles, la ciudad cuenta con el Aeropuerto «internazionale di Capodichino«, desde España, Easyjeat e Iberia Express ofrecen vuelos.
El aeropuerto y la ciudad están bien conectados por la compañía de autobuses «ANM Alibus«, tenéis buses cada 30 minutos y el billete simple cuesta 3 euros.
Nápoles (en napolitano Napule) está situada a medio camino entre el monte Vesubio y los Campos Flégreos, es la ciudad más poblada del sur de Italia, en la región de Campania.
El Hotel donde nos hospedamos y tuvimos la convención, pertenecía a la cadena española de hoteles NH, de sobra conocida por todos, y que de antemano ya sabes que no te vas a llevar ninguna sorpresa desagradable. Además la vista panorámica desde nuestras habitaciones era fantástica.
También si lo preferís podéis optar por la formula B&B (Bed and Breakfast), los cuales tienen una buena relación calidad precio. Desde aquí os recomendamos el B&B «Piazza Dante», muy cómodo y ubicado en el centro ciudad.
Qué visitar:
- Monasterio de Santa Clara, la basílica gótica más grande de la ciudad, conserva las reliquias de 21 miembros de la dinastía Borbón. El primer sábado del mes de mayo las cápsulas que contienen la sangre de San Genaro (patrón de la ciudad de Nápoles) son trasladadas en solemne procesión desde la Catedral de Nápoles hasta esta basílica, donde se celebra una pequeña ceremonia.
- Calle San Gregorio Armeno, la famosa calle llena de pesebres y de figuras de personajes famosos. La calle llama la atención por su combinación de luces y colores.
- Capilla de San Severo, en cuyo interior se encuentra la célebre estatua del «Cristo velado que deja sin aliento».
- También podéis visitar el Nápoles subterráneo. Visita, guiada, que dura cerca de una hora y media a 40 metros de profundidad, dónde se encuentra un mundo nuevo que remonta a la época romana. Los horarios son fijos y el lugar de encuentro está en la Plaza Trieste, Bar Gambrinus.
- Castillo nuevo, conocido como Macho angevino, símbolo de Nápoles. Precioso castillo de la época medieval.
- Plaza del Plebiscito, se encuentra en el corazón de la ciudad, en ella tienen lugar numerosos espectáculos y conciertos.
- Si queréis ir de compras, la calle Toledo es perfecta, multitud de tiendas para que os traigáis algún recuerdo de vuestro viaje.
Qué comer.
- Le sfogliatelle, dulce elaborado de hojaldre y que se suele rellenar de pasta de almendras.
- La pastiera, pastel típico de la Semana Santa de Nápoles.
- El babà, se trata un dulce elaborado en el horno con forma de corona. Una de las principales características es que la masa se remojada en licor (generalmente ron o limoncello).
- Limoncello, licor típico de Italia y el favorito de la maleta roja. (El que hace mi abuela es uno de los mejores).
- la pizza napoletana, la peculiaridad de la pizza napolitana se debe principalmente a la masa de su base.
Sin duda os recomiendo una escapada a Nápoles e intentaré escribir otro post sobre Cilento y la Costa Amalfitana dónde he pasado una semana de vacaciones este verano y que sin duda os encantará, las cuales junto a Nápoles pueden ser una buena opción para vuestra próxima escapada.
Maleta rosa os espera a todos en Italia, y en particular al Sur. Hasta el próximo post!!!